Rod Stewart y Jools Holland reviven el jazz con ‘Swing Fever’: Un tributo a los clásicos del género

A pesar de sus 79 años, Rod Stewart demuestra que sigue siendo una fuerza imparable en la música. El legendario cantante británico, también conocido como Sir Rod Stewart por el Palacio de Buckingham, ha lanzado su nuevo álbum de estudio, «Swing Fever», en colaboración con Jools Holland, compuesto por un total de 13 cautivadoras canciones.

En este nuevo trabajo, Stewart y Holland buscan revivir los grandes éxitos del jazz, infundiendo elementos característicos del género para deleitar a sus seguidores con un ritmo contagioso y una vibrante energía.

En «Swing Fever», ambos artistas rinden homenaje a clásicos como ‘Ain’t Misbehavin’, ‘Almost Like Being In Love’, ‘Lullaby Of Broadway’ y ‘Pennies From Heaven’, acompañados de videos musicales que añaden una dimensión visual única a la experiencia auditiva. El álbum surge de las conversaciones entre Stewart y Holland durante la pandemia, donde Stewart expresó su deseo de crear un disco que capturara la esencia del Rock n’ Roll de su época.

El nacimiento de este proyecto fue marcado por una conversación telefónica entre Stewart y Holland, quien recuerda emocionado: «Siempre fui fan de Rod, pero nos dimos cuenta de que compartíamos un profundo amor por la música antigua». Stewart tenía una única solicitud para Holland: «No quiero canciones lentas», enfatizó. En lugar de eso, buscaban piezas alegres y vivaces para contrarrestar los tiempos sombríos que vivimos.

Stewart valora profundamente estas canciones, que fueron creadas en una época donde los compositores se especializaban en su arte. En contraste, hoy en día la mayoría de los artistas escriben sus propias letras. «Creo que los Beatles tuvieron la culpa. Pensaron que podrían escribir canciones, y todos siguieron su ejemplo», reflexiona Holland sobre este cambio en la industria musical.

El proceso de creación de «Swing Fever» fue un deleite para ambos artistas, sin conflictos ni disputas. Todo fue grabado en vivo en el estudio de Jools, lo que añade una autenticidad palpable a cada nota. «Fue una gran alegría. No hubo discusiones ni peleas. Fue puro placer, y creo que se refleja en la música», comparte Stewart sobre la experiencia de grabación, que contó con la participación de 18 músicos apiñados en un espacio íntimo, creando una atmósfera de camaradería y creatividad sin igual.